Educaequis. Terapia Asistida con Animales de Compañía.

Irene Muñoz no deja de trabajar por y para seguir con el proyecto de hipoterapia  que comenzó hace ya casi tres años en Alcázar y que ahora también lo continua con AFYMOS, una asociación de familiares y amigos de personas con capacidades diferentes, ubicada en la localidad de Socuéllamos.
Junto a Irene y también trabajando para desarrollar este proyecto  está  Luis Manuel Villena (fisioterapeuta), Carlos, Pilar y Alicia como voluntarios;  Ángel y Antonio propietarios de las cuadras y profesores ecuestres.
AFYMOS es una asociación sin ánimo de lucro que lleva más de 20 años intentando mejorar la calidad de vida de niños, jóvenes y adultos con necesidades específicas en dicha localidad.
AFYMOS localizada en la calle Acequia nº 1  cuenta con una red sólida de voluntarios, profesionales y simpatizantes concienciados con  ésta situación social que cubren aspectos de la vida de las personas con discacidad como: atención en la infancia, asesoramiento a familias, centro ocupacional, intervención logopédica, hidroterapia, hipoterapia y otras actividades relacionadas con la educación integral en todas las edades.
Una imagen vales más que mil palabras...

APROXIMACIÓN TEÓRICA A LAS TERAPIAS ASISTIDAS CON ANIMALES DE COMPAÑÍA
La Terapia asistida por animales (TAA) fue definida de una manera científica por el Dr. M. Levinson (1907-1984) a mediados del siglo XX y desde entonces ha sido objeto de numerosos estudios y se ha desarrollado como una herramienta más en el amplio espectro de terapias complementaria a distintas afecciones tanto físicas como psíquicas.
El objetivo general de este grupo de actividades es facilitar, por medio del soporte emocional y de motivación que ejerce sin duda alguna la presencia de otro ser vivo, la consecución de los objetivos marcados en la intervención con cada alumno en particular. Es, sin duda, una terapia de apoyo nunca una solución o una “alternativa milagrosa” a los tratamientos específicos de cada alteración.
Los efectos positivos de estas terapias han sido estudiados, debatidos y reconocidos por prestigiosos profesionales del mundo de la medicina y de la Psicología. Katcher (1993), Allard y Ricard (1992), Mayers (1998), Bailey (1987) propusieron en su día distintos ejemplos de cómo las Terapias Asistidas mejoran el resultado y facilitan la ejecución de los tratamientos habituales para diferentes problemas.

BENEFICIOS DE LAS TERAPIAS ASISTIDAS CON ANIMALES DE COMPAÑÍA

Beneficios físicos: Mejorar las habilidades motoras tales como la deambulación, la sedestación, el equilibrio. Incrementar el ejercicio según sus posibilidades a la vez que podremos llegar a mejorar y fomentar la salud cardiovascular ( Friedmann – Thomas, 1995).
Beneficios psíquicos: Mejora notable de las interacciones verbales del niño con su entorno más inmediato teniendo como intermediario el animal protagonista de cada terapia.  Se ha podido observar el avance en el plano comunicativo de niños con trastornos del desarrollo.
Con la relación animal – alumno estamos fomentando las habilidades de ocio, donde el niño compartirá momentos de encuentros con otros niños por lo que puede incrementarse el conocimiento de sí mismo en un entorno social a la vez que aumenta la autoestima.
Beneficios sociales: Facilita las actividades en grupo y el desempeño de roles determinados y relacionados con el cuidado del animal.
Al ser el animal un centro de interés puede suscitar conversaciones y diálogos  (respeto de turnos, consideración del igual como elemento en la interacción) con el mismo como punto fundamental de referencia. Estimula el diálogo. Puede favorecer la responsabilidad de los niños que se encargan de su alimentación, higiene...
Fomenta la empatía dotando al animal de sentimientos, necesidades básicas y sentimientos equiparados a las experimentadas por los humanos.
Beneficios del ámbito educativo: Incrementa el vocabulario y la complejidad de las construcciones verbales, llevará a un mayor esfuerzo de los niños al dirigirse al animal o al interaccionar con los compañeros para hacerse entender con una mayor claridad. Será visible el aprendizaje y uso de nuevos términos que hacen referencia al animal. Mejora el conocimiento de conceptos más abstractos y aumenta la motivación hacia el aprendizaje tomando el contacto con el animal como un refuerzo.
La gama de actividades que se pueden realizar con los animales es muy variada y dependerá del nivel cognitivo del niño y de sus necesidades. Desde esta consideración podemos proponer actividades de estimulación multisensorial para los alumnos gravemente afectados y actividades lógico – matemáticas, de atención, de memoria, tareas espacio – temporales… para alumnos que poseen un mejor nivel curricular